Saludos bloggeros, llevaba ya bastante sin escribir y bueno, he de decir que no tengo demasiado que contar, salvo que a veces pienso que mi razón le ha ganado totalmente la partida a mi corazón.
Por explicaciones que no vienen al caso, diré que ya nada es como antes. Yo no pedí que esto fuera así y no sé si yo me estoy perdiendo a mí mismo anímicamente. La resistencia mental no es uno de mis fuertes y verdaderamente, cada día la estoy fortaleciendo.
Lo que ayer parecía importante, ser el futuro de mi vida y de mis ilusiones, hoy ya es agua pasada. Era un futuro que no era para mí, supongo, aunque tiene más pros que contras. No voy a dejar que nadie me mangonee, ni de sufrir por alguien que no lo merece. Quiero volver a ser ese espíritu libre e indomable que siempre fui y que siempre quise ser... aunque una bonita sonrisa y unos ojos relucientes me hagan cambiar de idea.
Siento el encriptamiento de esta entrada, pero prefiero manifestar este sentimiento así, que yo me entiendo, que de otra manera. Hasta otra.
"La libertad no tiene su valor en sí misma: hay que apreciarla por las cosas que con ella se consiguen." -Ramiro de Maeztu-
viernes, 24 de agosto de 2012
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